Los trabajadores despedidos de la planta de Fabricaciones Militares de Azul, acompañados por representantes de ATE, realizaron una manifestación frente a la sede del gobierno provincial. Los obreros reclamaron que el ejecutivo bonaerense se encargue de la reapertura de la planta clausurada por el Ministerio de Defensa.
La desactivación de la fábrica, ordenada por el gobierno en diciembre del pasado año, dejó a más de 250 trabajadores en la calle. Ante este panorama se sucedieron numerosas manifestaciones, medidas de fuerza y estériles intentos por parte de los obreros de ser recibidos por representantes del gobierno nacional.
Ante el total desinterés del ejecutivo nacional por dar una solución al conflicto, desde ATE idearon un plan de reactivación que incluye la provincialización de la planta. El secretario general de ATE provincia de Buenos Aires, Oscar de Isasi, explicó al respecto que “Venimos a plantearle a la gobernadora la necesidad de intervención del gobierno provincial en el conflicto de Fanazul para que se reabra la fábrica y se reincorpore a todos los trabajadores y trabajadoras. Entendemos que al no haber una solución adecuada por parte del gobierno nacional, la gobernadora debería intervenir para resolver un problema que atañe a todos los bonaerenses del centro de la provincia”.
También estuvo presente en la manifestación la secretaria general de ATE Azul, Vanina Zurita. La gremialista sostuvo que “todo Azul abraza la causa de los fabriqueros que fue un golpe a 220 familias y a la ciudad”. Por otro lado, Zurita reclamó que “la gobernadora tendría que tomar cartas en el asunto, porque la fábrica tienen 72 años en Azul, hemos realizado puebladas en rechazo al cierre y hemos demostrado que para nosotros la reapertura de Fanazul es indispensable”.
El plan de reactivación que fue presentado por el gremio y los empleados de la fábrica, incluyó una diversificación y nuevas funciones para la planta. Las posibles tareas detalladas en el plan fueron la prestación de servicios de grammafiado, servicio de calibración, intervención en canteras, planta de recarga de matafuegos o producción de anticongelantes. En ese sentido, desde ATE aseguraron que “Lejos de dar pérdida puede transformarse en una empresa que además de abocarse a la defensa nacional sea rentable económicamente”.
Por otra parte, mientras se llevaba a cabo el reclamo frente a gobernación, en la ciudad de Azul, obreros de la fábrica cortaron a modo de protesta las líneas ferroviarias que pasan por la localidad. Según afirmaron los trabajadores despedidos, la medida se llevó a cabo para visibilizar la problemática, que ha tenido una escasa repercusión en los medios nacionales.
Finalmente cabe destacar que la gobernadora María Eugenia Vidal no recibió a los trabajadores ni a sus representantes gremiales ya que partió rumbo a Bahía Blanca donde inauguró nuevas obras. Igualmente, la carta con los detalles de la reactivación fue entregada en gobernación.
