El jefe de la bancada del Frente Para La Victoria, José Ottavis, realizó una bajada de línea que genero un nuevo quiebre, ahora entre sus pares de bancadas. El titular del bloque les ordenó ceder el 50 por ciento de los módulos a los diputados camporistas para “bancar” a los miembros de esa organización que quedaron afuera.
Mientras una gran cantidad de militantes pudieron ubicarse y acomodarse en intendencias y secretarías municipales, muchos otros quedaron afuera de todo. “Ottavis quiere ayudar a los del riñón que están sin cargo”, aseguraron desde la Legislatura, “Fue una orden, no hubo debate y es un tema que viene desde hace rato pero se conoció ahora” reconocieron.
Cada diputado, hasta que se reparten las comisiones, recibe 3 mil módulos, cada uno cotizado en 70 pesos, por lo cual estamos hablando de unos 210 mil pesos, de los cuales deberían donar a la causa, unos 105 mil suculentos pesos.
Esta orden dictada por José Ottavis, que termina de quebrar definitivamente al bloque del FpV, se inscribe en el reacomodamiento que sufrió el bloque del FpV durante la discusión del Presupuesto en la Legislatura. En aquella sesión, el sector alineado con los intendentes votó a favor de la partida y del endeudamiento, pero el bloque camporista, que responde a Ottavis, acompañó el Presupuesto pero se negó a respaldar el endeudamiento propuesto por el Ejecutivo que encabeza María Eugenia Vidal. “yo no voy a mantener a estos pendejos…” habría sido la frase de un diputado alineado a con Fernando Espinoza.
