El abogado del Centro de Estudios legales y Sociales (CELS), Diego Morales, afirmó que el desalojo de Guernica “es un triste desenlace de algo que podría haber tenido otro final. Hasta el día de ayer el Estado estaba dando respuesta a las familias que ocupaban el predio, lamentablemente el fiscal entendió que el tiempo había terminado”.
En declaraciones a Todo Este Ruido por Radio Provincia destacó que “la decisión judicial seguramente fue en cooperación con el Ministerio de Seguridad” bonaerense.
Morales puntualizó que “quedaron cuatro barrios sin poder reubicar, hay muchas familias que hoy no tienen respuesta y la posibilidad de llegar a un acuerdo habría permitido que tuvieran otra protección. Las soluciones se fueron encontrando, pero algunos casos requerían más tiempo”.
Agregó que “las respuestas habitacionales podían estar en 6 meses. Anoche le solicitamos al juez la suspensión del desalojo ante la decisión del fiscal de ordenarlo para hoy. Lamentablemente eso no pudo suceder”.
Morales explicó que “algunas familias tenían situación de calle, violencia de género o de no pagar alquileres” y agregó que “faltaron ajustes que pueden parecer menores pero son muy sensibles como el embalaje de tus pertenencias, son procesos que llevan sus horas, pero los tiempos de la justicia primaron”.
