La tradicional Fiesta Productiva es organizada por la Cooperativa del Vino de la Costa, la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata y la Municipalidad de Berisso, a través de la Secretaría de Producción y el resto de las áreas involucradas en la propuesta.
Respecto a las reuniones de trabajo que se vienen desarrollando, el secretario de Producción, Pablo Swar, detalló: “Desde esta oficina se iniciaron diversos encuentros con las áreas municipales que participan activamente de la Fiesta para coordinar la organización, teniendo en cuenta que esta es una tarea conjunta”.
“También armamos una mesa de trabajo con la Cooperativa del Vino, los artesanos y diferentes actores que son piezas fundamentales de este evento”, destacó el referente de Producción.
Llamado a productores, gasttronómicos y artesanos
“La Fiesta del Vino tiene que ver con la esencia de la ciudad, tiene la impronta de los productores, del Mercado de la Ribera, artesanos y emprendedores locales”, subrayó Swar, quien recordó que entre el 21 de mayo y el 1 de junio, se llevará a cabo la inscripción para productores, gastronómicos y artesanos que deseen participar de esta Fiesta.
Para ser parte de la Muestra, los interesados en participar deberán completar un formulario y presentar una fotocopia del DNI en la Secretaría de Producción ubicada en Avenida Montevideo y Nueva York, 2do piso, de lunes a viernes en el horario de 9:00 a 12:00 horas.
Convocatoria a artistas
En cuanto a la Dirección de Cultura también se abrió la convocatoria de artistas que quieran participar de la Fiesta. Los mismos podrán acercar sus propuestas de lunes a viernes de 14:00 a 18:00 horas a Casa de Cultura ubicada en Avenida Montevideo Nº 821.
Organización del evento
Esta Muestra Productiva que es organizada de manera conjunta entre la Cooperativa de la Costa de Berisso, nuestro Municipio y la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata, cada mes de julio, se ha transformado a lo largo de los años en una actividad que convoca a miles de visitantes.
La Municipalidad de Berisso y la Cooperativa de la Costa desarrollan un trabajo conjunto durante todo el año y para la realización de esta Fiesta, se aporta desde la administración comunal la logística necesaria para el desarrollo de las actividades que incluyen entre otras acciones aspectos como seguridad, cobertura sanitaria, provisión de servicio eléctrico, controles bromatológicos, montado de escenarios, difusión y limpieza entre otros aspectos.
El año pasado
En su edición 2017, la Fiesta fue recorrida por más de 150 mil personas, durante los días de actividades. Entre ellas fue notable la presencia de personas de localidades de la región y de distintos puntos de la provincia de Buenos Aires. A la misma se sumaron también visitantes de otras provincias y del exterior que se encontraban en nuestro país. Las encuestas de satisfacción registradas durante los dos días de la muestra, indicaron una total aceptación a la calidad de los productos ofrecidos y a la organización general.
La Muestra contó con más de 140 puestos de productores y artesanos que encuentran en esta Fiesta una oportunidad de mostrar y comercializar sus productos, como así también hacer crecer sus emprendimientos. También más de 40 locaciones fueron parte del Patio de Comidas, los que alcanzaron niveles de ventas históricos agotando, en algunos casos, sus stocks.
El volumen de ventas estimado superó el año pasado los 12 millones de pesos. El tradicional Vino de la Costa en sus variantes, alcanzó una venta record de 18.000 litros en los stands y 1.000 litros en el patio de comidas.
Historia del Vino de la Costa
El Vino de la Costa guarda una rica historia propia. Durante el período de la inmigración masiva del que Berisso fue protagonista singular por su vida portuaria, en las tierras bajas de la isla Paulino y del Monte Costero muchos de los pioneros cultivaron sus quintas de verduras, hortalizas, frutales y vides, aprovechando la cercanía al mayor mercado consumidor del país.
Entre las décadas del ’40 y el ’60 se llegaron a vender más de un millón de litros anuales. Su elaboración fue desde el inicio un proceso casero, sin productos químicos, hecho con corazón y trabajo, buscando seducir los paladares de los trabajadores de los frigoríficos, para acompañar sus horas de descanso.
A pesar de aquella época de florecimiento y de su notable tradición local, el Vino de la Costa comenzó a ser amenazado por diversos factores que disminuyeron drásticamente su producción. La progresiva preponderancia de los vinos cuyanos, las crecidas extraordinarias del río de la Plata, la migración de los jóvenes hijos de los quinteros, jaquearon todo aquel esfuerzo de los pioneros y llevaron al Vino de la Costa, casi hasta su desaparición. Sobrevivió apenas para el consumo familiar y para la venta al menudeo, casi para los amigos.
Tras largos años fuera del circuito comercial, el Vino de la Costa se vio como una oportunidad de recuperar esa tradición inmigrante, pero principalmente como una alternativa de trabajo, la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata, la gestión municipal y un grupo de productores se pusieron a trabajar para reflotar el sueño inmigrante de TRABAJO Y PROGRESO.
Sin perder el concepto artesanal de la tradición productiva, los viñateros de Berisso volvieron a creer en el futuro de su producción de vides y ciruelos. En la actualidad, distribuidas en un pequeño número de fincas, la superficie total de cultivo que ocupa la vid americana alcanza a unas 25 hectáreas en el partido de Berisso, con tendencia a incrementarse. La producción de vino ha superado en los últimos años los 50.000 litros anuales.
Otro fruto que cabe destacar de esta relación de la Cooperativa, la Universidad y la Municipalidad es que tras años de presentaciones de investigaciones, fundamentaciones y entrevistas el Vino de la Costa, fue reconocido en el año 2013, como Vino Regional por el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV). De acuerdo a las leyes Nº 14.878 y No 24.566, el organismo consideró a la bebida elaborada en la ciudad de Berisso con Vitis Labrusca, variedad Isabella, como “Vino Regional” y como un producto tradicional típico de la región, bajo la denominación de “Vino de la Costa”.
