El peleador de artes marciales mixtas, Santiago Ponzinibbio, que el pasado sábado obtuvo una importante victoria en nuestro país, fue distinguido por el intendente de La Plata, Julio Garro, quien expresó que el deportista platense es “un exponente de lo que se puede alcanzar en la vida, con esfuerzo, sacrificio y valores”.
El platense de 32 años que viene representando a nuestro país en las competencias de UFC y que el último fin de semana logró una trascendental victoria en el Parque Roca ante el estadounidense Neil Magny, mostró su alegría y satisfacción por la distinción y manifestó: “Cerramos con llave de oro la pelea del otro día, ahora venir a mi ciudad, a mi casa y tener este recibimiento y cariño, es algo indescriptible después de tantos años de lucha”.
En ese sentido, Garro elogió a Ponzinibbio y dijo que “nos gustaría que tenga la posibilidad con su disciplina de contener a chicos a través del deporte. Valorar su esfuerzo, es el camino que tienen que tomar los más chicos, también todos los platenses y los argentinos en general”.
Más allá de seguir entrenándose con el objetivo de lograr su gran anhelo, competir por el título mundial de UFC, Ponzinibbio resaltó su idea de promover el deporte en la ciudad: “Todo lo que pueda hacer para ayudar a través del deporte es muy válido, porque el deporte transforma la vida: educa y enseña valores; por eso quiero usarlo para ayudar a mucha gente de mi ciudad”.
Del reconocimiento participaron el secretario de Cultura y Educación Municipal, Gustavo Silva, y el director de Deportes local, Alberto Palmieri.
Su trayectoria
Santiago Ponzinibbio es un platense de 32 años que actualmente pelea en UFC. Desde muy chico se identificó con el deporte y sus primeros pasos los dio con el Rugby, en La Plata Rugby Club. Luego comenzó a entrenar kickboxing y de manera amateur empezó a entrenar en la ciudad junto a amigos.
Se formó y comenzó a dar clases de lucha mientras competía en la región. Sus buenos resultados lo alentaron a viajar a Brasil, uno de los países más competitivos para la MMA. Allí trabajó de muchas cosas para sobrevivir mientras continuaba entrenándose.
Tras la lucha y perseverancia, logró ingresar a un reality show muy popular de la televisión brasilera junto a 500 atletas en donde tomó notoriedad pública y pudo mostrar sus facetas como peleador.
Eso le permitió ingresar a la liga más competitiva: la UFC, lo que le valió irse a vivir a Estados Unidos para cumplir su gran sueño. Le tocó pelear y lucirse: de 31 peleas, ganó 28. Ahora tiene un nuevo sueño: traer el título Mundial a La Plata el año próximo.
