Los trabajadores municipales de Esteban Echeverría fueron reprimidos ayer por infantería de la policía bonaerense, cuando intentaban entrar al palacio municipal para realizar una asamblea en reclamo al despido de 30 trabajadores municipales de las 5 delegaciones municipales, del corralón, del galpón de Desarrollo Social y del Hospital Santamarina.
“El ejecutivo dice que tiene que reducir la planta para que se ajuste al nuevo presupuesto que se aprobó la semana pasada, lo cual es irrisorio porque es de más de 10 mil millones de pesos” denuncia el Secretario del STMEE, Adrián Gouin, y apuntala que “muchos de los despedidos llevan más de 10 años trabajando contratados para el municipio y ahora los dejan tirados”.
El Sindicato de Trabajadores municipales de Esteban Echeverría (STMEE) había movilizado acompañado por la Federación de Sindicatos municipales Bonaerenses (FESIMUBO) y la Corriente Clasista Combativa (CCC) para reunirse con la Secretaría de Gobierno de Echeverría, Fabiana Bertino que los había citado a las 10 horas para continuar con las reuniones que el sindicato venia teniendo con el ejecutivo municipal para destrabar el conflicto que se desencadeno tras el despido de 30 trabajadores municipales el 29 de Noviembre.
Adrian Gouin y el Secretario Adjunto de FESIMUBO, Rubén Paulillo, junto a una gran movilización de trabajadores, esperaron una hora y media en la puerta del municipio sin ser recibidos por el ejecutivo.
Cerca del mediodía el Secretario de Seguridad del Municipio salió a la puerta del palacio municipal avisándoles a los trabajadores que desde ese momento él era el vocero del municipio y que los iba a recibir a las 14 horas.
Ante esta situación los trabajadores intentaron ingresar al salón del palacio municipal para realizar una asamblea y definir los pasos a seguir ya que muchos de ellos consideraban esta acción del ejecutivo municipal como una provocación. “Es una respuesta clara, es el cierre, de hecho, de las negociaciones por la reincorporación de los compañeros despedidos”” afirmó Rubén Paulillo.
Ante el intento de ingresar el palacio, la Infantería de la Policía Bonaerense comenzó a reprimir a los trabajadores sin previo aviso dejando 6 trabajadores heridos por balas de goma: 4 miembros de la comisión directiva (incluido el Secretario General, Adrian Gouin) y dos delegados.
