Vecinos autoconvocados que residen permanentemente en la zona de Los Talas presentarán ante el Concejo Deliberante un proyecto que regularice las actividades recreativas en casas particulares, quintas, chalets de fin de semana y salones de usos múltiples para moderar la convivencia de los lugareños y visitantes y evitar fiestas clandestinas.
“Nos movilizamos para impedir la constante proliferación de fiestas clandestinas y fiestas de todo tipo, de noche y de día, que se realizan en la zona y que perturban la vida cotidiana de las familias que vivimos acá”, expresó un frentista tras ser constantemente desoídos por las gestiones municipales y que se vio en aumento durante la pandemia de COVID-19.
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Por otro lado, comentaron a El Correo Gráfico que se trata de residencias que en su mayoría son de propietarios que no viven en la zona, que poseen instalaciones con mínimos servicios de seguridad.
“Son unos quinchos, que en su mayoría no cuentan ni con un baño, que se alquilan para realizar eventos de todos tipo donde se generan conflictos de todo tipo. La música altísima, que ni siquiera permiten descansar a los vecinos. Uno por el consumo de alcohol que deriva en riñas, peleas a las trompadas por el barrio, autos andando a toda velocidad por la calles y choques. Esto conlleva que a lo largo de todos los años conlleve accidentes y muertes por la Ruta 15, porque salen conductores ebrios de estos encuentros”, acotaron los vecinos de Los Talas.
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Ante los reiterados reclamos, se contactaron con el actual director de Seguridad Vial y Ciudadana impuesto en la gestión de Fabián Cagliardi, Federico Ruiz, quien se excusó diciendo que ‘el Municipio no tiene una ordenanza específica que regule estas situaciones’ y que solo se rige por una Ley Provincial donde se establece que se pueda realizar actividades hasta la 5 y 30 de la mañana.
“El artículo 1 de esa ley habla de establecimientos que se dediquen a estas actividades como bares, salones… estas son las propiedades [las situadas en Los Talas], son residencias particulares y a veces ni siquiera eso son, son un quincho o una pequeña casa. Son instalaciones sin ninguna norma de seguridad, que no está habilitado para la actividad. El municipio no controla, no hay matafuegos, no hay área protegida (servicio de emergencia médica), no hay personal de seguridad, en la piletas o natatorios no se cuentan con un guardavida”, aseveraron los vecinos sobre los grises que no están resguardado para las actividades comerciales y recreativas de estos lugares.
“Lo que queremos ahora es impulsar un proyecto de ordenanza , que presentaremos en todos los bloques, que regule la convivencia en Los Talas, que es una zona particular de Berisso ya que no es una zona urbana, es rural, donde somos pocas las familias que residimos permanentemente, aunque cada vez más se está urbanizando, perturba la tranquilidad”, remarcan los lugareños.
Por otra parte, agregan que las quejas y petitorios con lo que lidian en cada gestión, la falta de agua, de servicio de gas, cloacas, servicio de colectivo irregular. “Frente a todas estas contingencias que tenemos que lidiar a diario, somos electrodependientes, y es el único servicio que llega y no tenemos tarifa por ruralidad, es la normal, y la proliferación de este tipo de fiestas, con gente ebria y el volumen a todo lo que dé, perturba nuestro estilo de vida”, indicaron los frentistas.
El proyecto de ordenanza que peticionarán en el Concejo Deliberante solicitará que se cree un empadronamiento de aquellas casas quintas, quinchos, salones de usos múltiples por intermedio de los propietarios y/o responsables que realicen la actividad comercial recreativa; que se habilite las capacidades máximas de personas permitidas por el inmueble, regular los horarios de los eventos.
“Si no tenemos respuesta, recurriremos al cumplimiento del Código Civil, que el artículo 1973, establece la normativa sobre molestias ocasionadas en inmuebles vecinos que exceden la normal tolerancia; lo mismo con las que tienen piletas de agua salada no cuentan con las medidas de seguridad y que cuenten con un seguro, si hay pileta deben contratar un bañero capacitado para el resguardo de las personas. Es lo que exigimos porque el municipio al no regular las actividades, cualquiera alquila un lugar, y muchas veces la vivienda son precarias y corren muchos riesgos”, concluyeron los vecinos de Los Talas.
